• El porcentaje de tiros de campo efectivos del jugador es de un 50.8%.
• La tasa de intentos de triples alcanza el 32.6%.

Estos indicadores cruciales reflejan el rendimiento del jugador, que ha sido una pieza fundamental en cada partido gracias a su destreza ofensiva y habilidad para anotar desde distintas posiciones. Su rendimiento se traduce en un promedio de 46.6 puntos de fantasía por juego, lo que lo convierte en un elemento valioso en ligas de fantasía. La eficiencia del jugador se manifiesta aún más cuando se analiza su rendimiento por minuto, alcanzando 1.3 puntos de fantasía por minuto en cancha. Esta capacidad para impactar el juego con eficiencia se debe a su habilidad no solo de ejecutar disparos con precisión, sino también a su estrategia en el uso de tiros de larga distancia. Esto es especialmente notable dada la frecuencia con la que se intenta estos tiros, lo que indica una alta confianza en ese aspecto de su juego.

Fuente: Vanguardia

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