• Hace ocho años, Ronda Rousey, ex campeona indiscutida de peso gallo, intentó recuperar su título enfrentándose a la brasileña Amanda Nunes en el Octágono.
• A pesar de su determinación, Rousey fue derrotada por Nunes, quien mostró una notable superioridad en habilidades de golpeo, lo que selló el destino de Rousey en el UFC.

Aquella noche del 30 de diciembre, en Las Vegas, Rousey regresó al Octágono, deseando redimirse tras su dura derrota por nocaut ante Holly Holm un año antes. Sin embargo, la fuerza contundente de Nunes, conocida como «La Leona», fue demasiado para Rousey. Con un historial impecable hasta entonces, Rousey había sido un fenómeno mediático que llevó el MMA femenino a nuevos niveles de popularidad. Nunes, que más tarde se convertiría en la primera campeona de dos divisiones de UFC, demostró por qué era considerada una fuerza imparable. Desde esa derrota, Rousey se alejó del hexágono para apostar por una carrera exitosa en la WWE. A pesar de los rumores recientes sobre un posible regreso al UFC, Rousey negó rotundamente cualquier intención, citando preocupaciones sobre su salud neurológica como la razón principal.

Fuente: Vanguardia

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