En julio 3, 2024, Brittany Alvarado, ex empleada de San Diego Wave, acusó en una publicación en redes sociales a la presidenta del club, Jill Ellis, de un patrón de comportamiento abusivo. Alvarado mencionó impactos graves en la salud mental propia y de otros empleados, afirmando que Ellis «no tiene lugar en este deporte.» El equipo negó vehementemente las acusaciones, calificándolas de «inexactas y difamatorias,» y defendió a la ex entrenadora de la selección nacional de Estados Unidos. Alvarado también afirmó que el club encubre su imagen pública y perpetúa la «discriminación contra las mujeres,» señalando que casi el 75% de los más de 30 empleados que dejaron el club desde su temporada inaugural en 2022 eran mujeres. San Diego anunció su intención de buscar «todas las vías legales» para abordar este asunto, en respuesta a las acusaciones de Alvarado.
noviembre 11, 2024